Diablo III Reaper of Souls para Windows

Extensión del mejor juego hack'n'slash de Blizzard

Diablo III Reaper of Souls es la extensión del juego Diablo III publicado por Blizzard en 2012. Esta extensión (que requiere tener el juego original) amplía ostensiblemente el contenido de Diablo y lo hace aún más adictivo, con una nueva clase, un nuevo modo de juego y otros añadidos.

El rey de los hack'n'slash ha vuelto

El mejor hack'n'slash vuelve, para alegría de todos. Como siempre en la serie, el demonio que parecía derrotado a base de explosiones, ha regresado, así que es momento de nuevo de salvar el mundo. Un nuevo acto sigue pues a la historia original, así como la posibilidad de llevar a tus personajes hasta el nivel 70, y una nueva clase: las cruzadas. Nuevo sería sólo una forma de hablar, y es que el personaje recuerda mucho al paladín de Diablo II y su brutal resistencia a encajar golpes.

Una sola clase nueva, poco para una extensión de Diablo. Pero hay otras novedades que enriquecen la experiencia de juego, sobre todo el excelente modo aventura. Este nuevo modo permite recorrer el mundo en el orden que decidas, comenzando y explorando libremente mientras el nivel de los rivales se adapta al tuyo. Son buenas noticias, ya que podrás lanzar tus propias cruzadas sin tener que volver a empezar desde el inicio.

El sistema permite misiones dinámicas y aleatorias, por todo el mapa, siempre con más contenido e interés. Un nuevo modo para Diablo III, que por fin le proporciona el contenido para largo plazo, tan esperado desde su lanzamiento.

Endiabladamente divertido, siempre

Diablo III Reaper of Souls no revoluciona la fórmula de Diablo, que mantiene los mecanismos que ya lo hicieron un éxito. Las novedades de esta extensión sirven para refrescar una jugabilidad algo tambaleante. La principal novedad en el gameplay es el nuevo sistema de loot: menos numerosos, los objetos dejados en tierra por los enemigos son mucho más adecuados y se adaptan mejor a tu clase. Una gran noticia que enriquece la experiencia de juego y que hace importante buscar esas recompensar para aumentar el poder de tu personaje.

La adicción en Diablo III siempre está ahí, para bien o para mal. Desde el inicio del juego, es fácil ver que la fórmula es muy eficaz: una mezcla de acción frenética, divertida y técnica, y, sobre todo, mucho entretenimiento. Y siempre con el apetito de lograr el preciado botín. Evita Reaper of Souls si todavía te estás desenganchando de Diablo III...

Una realización impecable con poco sabor propio

Como siempre en los juegos de Blizzard, Diablo III Reaper of Souls cuenta con una realizción que roza la perfección. Atención a los detalles, trabajo bien hecho... el resultado es muy a destacar. Comparado con el Diablo III original, la ambientación recupera los orígenes de la serie, con mundos más sombríos que parecían ya olvidados. El resultado está bien conseguido y se ajusta mejor a la serie que los coloridos escenarios de Diablo III.

Si bien los escenarios son muy detallados, hay también una cierta falta de originalidad. Los escenarios carecen de variedad y personalidad, y los mundos son bastante genéricos. Lo mismo sucede con el sonido: los doblajes son correctos, pero muy dentro de los clichés típicos de voces cavernosas. En cualquier caso, pese a esta cierta falta de originalidad y personalidad, Diablo III Reaper of Souls es un juego de altos vuelos, con un acabado digno de ver.

Indispensable para los fans de Diablo

El hack'n'slash regresa por suerte para nosotros. Los jugadores que regresen a Diablo III recibirán felices la extensión, los demás verán una excelente forma de entrar gracias a un sistema de juego repensado y el nuevo modo de aventura. Un éxito hecho con atención a los detalles con el único pero de una ligera falta de personalidad en el diseño.